crisis vital psicoemocionate

Mi Vida No Está Saliendo Como Tenía Planeado

7 de diciembre de 2016 Escrito por Equilibrio y Bienestar 0 comentarios en “Mi Vida No Está Saliendo Como Tenía Planeado”

Las cosas sencillamente han pasado. Incluso si eres una persona afortunada, que pueda reconocer que la mayoría de lo que has vivido ha salido bien, seguro que ha habido momentos en los que la vida se ha salido del plan que tenías previsto. Las expectativas no se han cumplido, los sueños no se han alcanzado o al menos no todos y los acontecimientos se han precipitado de forma inesperada

 

Y es que la vida tiene  la costumbre de hacer un poco lo que quiere. Tú tratas de ser el capitán que la gobierna pero en el fondo tu papel es más de primer oficial de cubierta que, aunque es cierto que diriges a toda la tripulación, también lo es que lo haces bajo las instrucciones del capitán

 

La pregunta es: ¿la satisfacción con tu vida depende entonces de si obtienes o no lo que deseas?. Porque tu experiencia vital ya te ha demostrado con creces que esto ocurre algunas veces, y otras muchas no. ¿Estamos entonces condenados/as al fracaso y a ser desgraciados/as?

 

La satisfacción con tu vida está influida no sólo por los acontecimientos que vives, ya se encuentren dentro de tu plan o no, sino también, y esto es mucho más importante, por cómo los percibes y reaccionas ante ellos

 

Esto no significa que tu actitud sea lo único que importa. Significa que ante acontecimientos que no decidiste que ocurrieran (algunos del día a día, incontrolables y desagradables como que no suene el despertador precisamente el día de una cita importante o encontrarte con una persona a la que llevabas un tiempo esquivando) , muchos de ellos dolorosos (la persona con la que un día decidiste formar una familia al cabo de los años decide abandonarte, has tenido un accidente y no puedes seguir desempeñando tu actividad actual, un imprevisto económico ha dado al traste con las vacaciones que te tenían tan ilusionado/a), tu forma de reaccionar influye en cómo vives esa experiencia, Empeorando o Suavizando tu percepción de la misma

 

Hay muchas formas de reaccionar. Unas más sanas que otras. Yo voy a proponerte una que puede aliviar tu experiencia, o al menos no agravarla. Es una forma de reaccionar que quizás no entre dentro de tu forma habitual de responder ante las circunstancias. Pero se aprende. Lo primero de todo es que tengas claro que siempre cuentas con un margen de elección en tu respuesta ante la vida. Unas veces es más desahogado y otras más pequeño, pero siempre puedes aprovechar lo que está en tu mano

 

Soy consciente de que si en este preciso momento sientes que tu vida te ha sacado a patadas del camino que tenías marcado, y lo estás viviendo como algo terrible, es muy posible que sientas que no tienes control alguno sobre tus reacciones. Que “no puedes evitar” lo que haces y que no tienes libertad para decidir cómo actuar. Siento mucho que estés pasando por estos duros momentos, algunas situaciones son realmente difíciles de vivir

 

La vida te plantea continuamente desafíos. Y en cada uno de ellos te pregunta ¿qué vas a hacer ahora?, ¿qué vas a hacer con lo que estás sintiendo?. Para ayudarte en tu respuesta te planteo algunas sugerencias:

En numerosas ocasiones no cerramos a nuestro punto de vista, sin permitir otras opiniones o alternativas. Intentar describir tus vivencias sin juzgarlas, adoptando una actitud de apertura y curiosidad, permitiéndote descubrir nuevas sensaciones y formas de actuar

 

Cuando nos suceden hechos dolorosos o desagradables muchas veces nos esforzamos hasta el agotamiento en tratar de escapar y de evitar lo que nos hacen sentir. Intentamos pensar en otra cosa y sin embargo nuestra cabeza vuelve una y otra vez sobre imágenes y recuerdos que no deseamos. Tu instinto natural te va a empujar a huir o luchar contra lo que estás sintiendo. Decide hacer lo contrario. Quédate y préstale atención, pero con una actitud de apertura, flexibilidad y aceptación. Aceptar puede hacerte pensar en tirar la toalla o resignarse, pero sin embargo se trata de un proceso que requiere que actúes y seas valiente. Implica permanecer en contacto con aquello que sientes, hacerle espacio y a la vez tener muy presentes tus valores personales, esos principios que guían tu vida, y que son los que te van a permitir que el dolor no aumente

 

No olvides que puedes quererte a ti mismo/a incluso cuando las cosas no van bien. Si la vida te golpea más empeño tienes que poner en esos momentos en cuidarte y tratarte con cariño

 

No te centres únicamente en la pérdida o en lo no conseguido, valora y ten presente el resto de cosas que has logrado durante tu vida y cada pequeño acontecimiento diario que merece la pena

 

Recuerda que las expectativas no dejan de ser deseos de que algo suceda de una determinada manera, son sólo probabilidades de que eso ocurra. Que las cosas no estén sucediendo como esperabas no significa que el futuro no te depare alegrías y satisfacciones. Mantener la esperanza, mostrar una actitud de curiosidad a lo que la vida te presente, permitirte una oportunidad de experimentar de forma diferente

 

Deja de dedicar tu valioso tiempo a pelearte con cómo son las cosas. Que no te guste lo que hay no va a hacer que cambie. Por supuesto tienes derecho al pataleo, a llorar la pérdida y a tener un día malo (o varios). Pero si te quedas enganchado al malestar de que las cosas no son como te gustarían al final puedes convertir la decepción y el dolor en sufrimiento y ansiedad. Te va a resultar más fácil que te digas a ti mismo/a algo como “las cosas son así”, “esto es lo que toca”, “no me gusta, pero es lo que hay”

 

Presta mucha atención a los detalles, más de una batalla se ha ganado al empezar a reparar en pequeños acontecimientos diarios que también son responsables de que la vida merezca la pena

 

Apóyate en quien te valora y aprecia. Comparte cómo te sientes. Y si te cuesta hacerlo solo/a o el alivio de tu entorno no es suficiente, o incluso si te está costando más trabajo de lo que esperabas volver a programar tu gps y encaminar de nuevo tu vida recuerda que psicólogos y psicólogas estamos aquí para orientar y acompañar en momentos en los que te sientes confuso/a o sobrepasado/ a por las circunstancias

 

La siguiente ficha puede utilizarse como un pequeño recuerdo de los recursos con los que contamos y del margen de acción que tenemos frente a las adversidades. Te animo a que crees tu propia ficha y a que la tengas presente si la soledad o el abatimiento aparezcan:

desafíos vitales psicoemocionate

 

Pistas

  • Responderle a la vida desde la aceptación y la calma puede resultar bastante difícil. Si ves que solo/a te cuesta trabajo no dudes en consultar con un/a psicólogo/a. Estamos aquí para acompañar y orientar ante las experiencias vitales complicadas

 

  • Decide estar contigo de forma amorosa, amable y autocompasiva. La vida ya está siendo dura contigo, no añadas sufrimiento a tu dolor con palabras duras y reproches, con comportamientos que intensifiquen tu malestar

 

Idea clave

La vida no suele suceder como uno/a la tiene prevista, más bien es una sucesión constante de desafíos, pero las personas tenemos el poder de elegir cómo respondemos ante ellos y conseguir reducir nuestra vivencia del estrés y el dolor


firma-ok
¿Te gustaría tener una Sesión de Psicología?
Prueba la psicología Online (email, videoconferencia) fácil, cómoda y eficaz.
Ponte en contacto conmigo y te informaré sin compromiso
email. marta@psicoemocionate.com telf. (+34) 622.595.544


Guardar

Guardar

Guardar

Guardar

Guardar

Guardar

Tags:

Aún no hay comentarios. ¿Te gustaría añadir uno?

Escribe una opinión

Tu email no será publicado.This is a required field!

Suscríbete al blog por correo electrónico

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir notificaciones de nuevas entradas.

Comparte este artículo

Share on FacebookShare on Google+Tweet about this on TwitterEmail this to someoneShare on LinkedIn