La APA (Asociación Americana de Psicología) considera dolor crónico aquel que persiste durante más de seis meses, y puede referirse a diferentes patologías como fibromialgia, cefaleas o artritis entre otras
El dolor crónico es física y psicológicamente incapacitante, y el malestar constante que provoca genera mucha frustración, irritabilidad y ansiedad, que la persona descarga tanto consigo misma como con sus seres queridos y su entorno
No sólo hay que proporcionar tratamiento para las consecuencias físicas. Es necesario también que la persona aprenda a manejar los aspectos psicológicos y emocionales del dolor
Dentro de las terapias psicológicas para el dolor crónico, las técnicas cognitivo-conductuales son las más empleadas por su demostrada efectividad. Y más recientemente se están aplicando también herramientas de las terapias psicológicas de tercera generación, como es el caso de la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT)
Estos tratamientos psicológicos trabajan fundamentalmente las siguientes técnicas:
- Psicoeducación: dirigida a enseñar a la persona qué elementos intervienen en la experiencia de dolor, cómo la forma en que se afronta el dolor puede aumentarlo o reducirlo y cómo puede ayudarle el tratamiento psicológico
- Técnicas de Respiración y Relajación: tanto el dolor como centrar la atención en él provocan tensión muscular, lo que a su vez hace que la persona se centre aún más en su dolor. Con ejercicios de respiración y relajación muscular se ayuda a romper este círculo y se enseña a la persona cómo proporcionarse alivio y relajación
- Gestión de Emociones: ansiedad, ira, miedo o tristeza son emociones que acompañan al dolor crónico. Desarrollar habilidades para identificar, gestionar y regular estas emociones resulta fundamental para mejorar el estado anímico de la persona con dolor crónico
- Dirigir la Atención, Mindfulness: se promueve la atención y observación del momento presente, evitando que el pensamiento se sitúe insistentemente en el pasado o en el futuro
- Modificar Pensamientos Desadaptativos: se enseña a la persona a detectar y modificar aquellos pensamientos desadaptativos que la perturban y cómo sustituirlos por otros más apropiados
- Solución de Problemas: con esta técnica se busca reducir la ansiedad asociada a la incapacidad para tomar decisiones así como aumentar las habilidades para encontrar respuestas eficaces cuando se presentan dificultades
- Recuperar y Mantener Actividades: recuperar actividades diarias y mantener actividades agradables que poco a poco se han ido abandonando ante la presencia del dolor, teniendo en cuenta que no siempre pueden hacerse las mismas ni de la misma manera
- Asertividad: es muy frecuente que las personas con dolor crónico se quejen de que se sienten incomprendidas y que las discusiones con su entorno son continuas. Mejorar la comunicación y las relaciones interpersonales es clave pues un entorno adecuado puede ser un excelente apoyo emocional
- Aceptación Psicológica: responder a la experiencia de dolor sin intentar evitarla ni controlarla, permitiendo que la persona pueda continuar con su vida guiándose por aquellos valores que son importantes para ella, independientemente de la presencia de pensamientos, sensaciones físicas y emociones desagradables
Pistas
- La intervención psicológica ayuda a reducir la experiencia de dolor y mejorar la forma en que se afronta éste, mejorando la calidad de vida
- Si únicamente con el tratamiento médico sientes que el dolor es quien controla tu vida, solicitar ayuda psicológica es una buena forma de afrontar el problema
Idea clave
El bienestar mental y emocional es igual de importante que el físico. La terapia psicológica enseña las destrezas y habilidades necesarias para manejar eficazmente el dolor crónico y mejorar la calidad de vida
¿Te gustaría tener una Sesión de Psicología?
Prueba la psicología Online (email, videoconferencia) fácil, cómoda y eficaz.
Ponte en contacto conmigo y te informaré sin compromiso
email. marta@psicoemocionate.com telf. (+34) 622.595.544